Thursday, February 28, 2008

Como ganar un Oscar (Directores)

Por Doly Mallet
® Reforma. (24 febrero 2008).

Si se trata de un Director:

1 Si va a hacer una película, inclínese por un drama. Es el género favorito de la Academia.

2 Evite el horror. La única cinta que ha ganado la estatuilla en este género ha sido El Silencio de los Inocentes (1991); y de suspenso fue Rebecca (1940) de Alfred Hitchcock. Si quiere ir a la segura, no se meta en caminos poco usados. Y olvídese por completo de la ciencia ficción; nunca ha ganado.

3 Si prefiere otro género, sus opciones son el musical (Chicago, 2002; La Novicia Rebelde, 1965; Mi Bella Dama, 1964) o el épico (Gladiador, 2000; El Último Emperador, 1987; Ben Hur, 1959).

4 Puede ser una comedia, pero deberá ser comedia-dramática-inteligente (Shakespeare Apasionado, 1998; Belleza Americana, 1999; Annie Hall, 1977); lo cual es difícil de conseguir. Por lo tanto, es más probable que quede solamente nominado y no gane el premio mayor. Insistimos, elija el drama.

5 Ya que tiene el drama, escoja una "bio-pic". Es mucho más factible que lo consideren si lo que está contando es un "caso real" (Una Mente Brillante, 2001; La Lista de Schindler, 1993; Amadeus, 1984). Aunque la vida del sujeto en cuestión ya sea dramática de por sí, usted exagérela lo más posible (Corazón Valiente, 1995).

6 Tendrá más posibilidades si su protagonista -aunque sea ficticio- tiene algún problema mental (Forrest Gump, 1994; Cuando los Hermanos se Encuentran, 1988; Una Mente Brillante, 2001).

7 La historia debe ser como sigue: protagonista noble de corazón lucha por un ideal (acorde con los valores americanos); sufre y sigue sufriendo para, al final, cumplir su meta. Puede ser más trágico si es pobre y muere (Golpes del Destino, 2004; Gladiador, 2000; Corazón Valiente, 1995).

8 Debe asegurarse que su película no haya representado una pérdida. Acuérdese del caso Pearl Harbor: Entre el Fuego y la Pasión (2001), que todos pensaron sería la nueva Titanic, pero como fue un desastre en taquilla los Óscares no la tomaron en cuenta.

9 No utilice temas tabúes; la Academia es conservadora. Aunque ya le está dando su lugar a los afroamericanos, todavía no termina de abrir las puertas a los homosexuales. Recuerde que la favorita Secreto en la Montaña (2005) perdió ante una película sobre el racismo, Alto Impacto (2004).

10 No olvide que la mayoría de los miembros de la Academia pertenecen a la comunidad judía; por lo mismo, no se le ocurra decir comentarios antisemitas o hacer una película demasiado católica que pueda ser interpretada como insultante. Mel Gibson era consentido en Corazón Valiente (5 Óscares, y otras 5 nominaciones) y cayó por completo de la gracia de los jueces con La Pasión de Cristo (2004, cero Óscares).

11 Otro camino es que haga su cinta con poco dinero, pero con un guión original y bien escrito. Probablemente no gane, pero se le nominará (Juno: Correr, Crecer y Tropezar, 2007; Pequeña Miss Sunshine, 2006; Entre Copas, 2004). Si corre con suerte, años después se puede convertir en director de culto (Quentin Tarantino por Tiempos Violentos, 1994; Los hermanos Coen por Fargo: Secuestro Involuntario, 1996).

12 Ya que tiene su producto, participe en diversos festivales. Si va adquiriendo premios, la Academia volteará a verlo más fácilmente.

© Derechos Reservados 2008 Consorcio Interamericano de Comunicación, S. A. de C. V.

Website:

Tuesday, February 26, 2008

Gabriela Spanic (Galeria 2)










Fotos:
TeleMundo, Revista Maxim, Urbe Bikini y TV Notas

Otras Fotos:
Gabriela Spanic (Galeria 3)

Fotos de Daniela Spanic
(Hermana Gemela de Gabriela):

Justo en la Mira

Justo en la Mira (Vantage Point, 2008) es una película dirigida por Pete Travis y estelarizada por Dennis Quaid, William Hurt y Forest Whitaker, con una actuación especial de Sigourney Weaver. Tal y como sucede en la película Rashomon (1950) de Akira Kurosawa, Justo en la Mira cuenta la historia distintas personas (con puntos de vista diferentes) tras el intento de asesinato del Presidente de los Estados Unidos de América durante una reunión cumbre en Salamanca, España. Los personajes involucrados son: Thomas Barnes (Dennis Quaid) y Kent Taylor (Matthew Fox), agentes del servicio secreto asignados para proteger al Presidente Ashton (William Hurt); Howard Lewis (Forest Whitaker), un turista norteamericano que ha captado algunas escenas previas al atentado con su videocámara; Enrique (Eduardo Noriega) un policía encubierto español, quien luce como sospechoso y la productora de televisión Rex Brooks (Sigourney Weaver), cuyo noticiero de Global News Network capta la escena del atentado. Tras ser herido de bala en un par de ocasiones, el Presidente es transportado en ambulancia, pero sucede una explosión en la plaza, que deja numerosas víctimas. Thomas Barnes, instantes después de la explosión, trata de hallar a los responsables mediante la grabación de Howard Lewis y la filmación de los reporteros de Rex Brooks. Todo aparece apuntar como responsable a Enrique, quien por su parte ha identificado a su ex-novia Veronica (Ayelet Zurer) como la portadora de la bomba. Ella ha huido del lugar simulando ser un paramédico, junto a Sam Suarez (Saïd Taghmaoui), quien es el cerebro de la operación. Los terroristas tienen conocimiento de que el Presidente (William Hurt)ha enviado a un doble a la plaza, por lo que Javier (Edgar Ramirez), soldado de fuerzas especiales que colabora con los terroristas (debido a que éstos tienen prisionero a su hermano) acude al hotel donde se encuentra realmente el Presidente para secuestrarlo. Tras una detonación que mata a muchos agentes, Javier mata al resto de los guardaespaldas y secuestra con ayuda de Sam y Veronica al Presidente, el cual es conducido a una ambulancia. Thomas Barnes hará todo lo posible por rescatar al mandatario, a pesar de la traición de uno de los agentes del Servicio Secreto.

Justo en la Mira establece una premisa interesante al llegar al fondo de los hechos mediante el rompecabezas que se forma con los elementos aportados por diferentes testigos del atentado. Sin embargo, pronto cae en cierta repetitividad al mostrar los mismos hechos con pocas y nuevas variantes. Al final la historia da un vuelco cuando el protagonista tiene la imagen completa del suceso y entonces veremos algunas secuencias de acción donde destaca la persecución de Barnes en automóvil tras los sospechosos. De cualquier manera, se agradece el esfuerzo de presentar de manera diferente una película de acción convencional.

Justo en la Mira: *** (Buena)

Saturday, February 23, 2008

Petroleo Sangriento

Petróleo Sangriento (There will be Blood, 2007) es una película basada parcialmente en la novela de Upton Sinclair "Oil!" (publicada en 1927) y en algunas referencias de la vida del magnate petrolero Edward L. Doheny. Petróleo Sangriento fue dirigida por Paul Thomas Anderson y estelarizada por Daniel Day-Lewis, Paul Dano y Dillon Freasier. La película nos cuenta la historia de un minero en búsqueda de plata, Daniel Plainview (Daniel Day-Lewis), quien accidentalmente descubre un pequeño yacimiento de petróleo en un sitio llamado Coyote Hills (1898). Al principio extraen el petróleo a cubetadas, aunque su gente irá tecnificando el proceso mediante la implementación de sistemas de extracción. Plainview comienza a amasar una pequeña fortuna (1911) y tras conocer de la existencia de abundantes reservas petroleras en un pueblo llamado Little Boston (en California) no duda en utilizar a su pequeño hijo adoptivo, H.W. Plainview (Dillon Freasier), para convencer a los granjeros de que le vendan sus tierras o al menos se las arrienden. El pequeño Plainview sufre un accidente que lo deja sordo, lo cual afecta l relación con su padre, quien termina ingresándolo de manera temporal en un internado. Daniel Plainview encuentra cierta resistencia en un joven predicador de Little Boston, Eli Sunday (Paul Dano), quien desea que parte del dinero obtenido sea destinado en la construcción de una iglesia. Plainview no sólo se enfrentará a la codicia de Sunday sino a la de un supuesto medio hermano y a la de los representantes de la poderosa petrolera Standard Oil, quienes desean comprarle el yacimiento o de lo contrario bloquear el transporte del combustible a través del ferrocarril. Plainview establece un plan alternativo al construir un oleoducto hasta la costa, donde surtirá de combustible a la Union Oil. El único terreno que no posee Plainview es el de un viejo granjero que pertenece a la congregación de Eli Sunday, quien obligará a Daniel a "rebautizarse" a cambio del permiso para usar el terreno para el oleoducto. Pasan los años y Daniel se consolida como magnate petrolero (1927), aunque termina disgustado con su hijo H.W. Plainview, quien tomará su propio camino. Al final, Daniel y Eli Sunday tendrán un nuevo y fatídico encuentro en la mansión de Plainview, cuando Eli acude a pedirle dinero pues ha quedado arruinado. La frase final de Daniel lo resume todo: "I'm finished."

La historia se sitúa en los inicios de la industria petrolera y detalla el desarrollo de la misma, cuando recién comenzaba la lucha económica por el control del energético. Petróleo Sangriento es un interesante relato que se destaca por la excelente actuación de Daniel Day-Lewis, quien aparece en escena casi todo el tiempo y encarna a un obsesivo empresario dispuesto a prevalecer sin importar sobre quién tenga que pasar por encima. Day-Lewis realiza un papel digno del Oscar a Mejor Actor.

Petróleo Sangriento: *** (Buena)

Thursday, February 21, 2008

Lindsay Lohan (Galeria 1)










Fotos:
Hollywood Press

Otras fotos:

El Ojo del Mal

El Ojo del Mal (The Eye, 2008) es el remake de la exitosa película del mismo nombre (The Eye, 2002) dirigida por los hemanos Pang. La nueva versión corre a cargo de David Moreau y Xavier Palud, siendo estelarizada por Jessica Alba, Alessandro Nivola y Parker Posey. Sydney Wells (Jessica Alba) es una joven violinista invidente, la cual es operada mediante un trasplante de córneas para poder recuperar la visión que perdió en su infancia por un accidente con fuegos artificiales. Sin embargo, Sydney comienza a observar extrañas imágenes que no sabe si son realidad o causadas por un defecto de visión. Durante su primera noche en el hospital, después de la operación, observa de manera borrosa una figura que se aleja, sin saber que se trata de una paciente que acaba de fallecer. El terapista de Sydney, Paul Faulkner (Alessandro Nivola), trata de analizar las visiones de su paciente, que incluyen fantasmas, fuego, muerte y el número 106. Lo más impactante para Sydney es percatarse (con ayuda de una foto) que el rostro que ve en el espejo no es el suyo, sino el de otra jovencita. Con la ayuda de Paul viaja a México para conocer el origen de la donadora de sus córneas, Ana Cristina Martinez (Fernanda Romero). Ana Cristina tenía la habilidad de ver el futuro y se suicidó debido a que no pudo impedir el incendio en una fábrica en su pueblo natal. Los familiares de las víctimas creyeron que la desgracia sucedió por culpa de Ana Cristina. De regreso a la frontera, Sydney y Paul se encuentran atrapados en el tráfico ocasionado en un accidente vial. Entonces Sydney observa un camión que transporta combustible y que porta el número 106, tal y como lo percibió en sus visiones. Entonces Sydney se da cuenta de que heredó de Ana Cristina la habilidad de predecir desgracias, como la que va a ocurrir.

El Ojo del Mal no presenta sorpresas para quienes vieron la película original, pues es prácticamente lo mismo. Para quienes no conocieron la primera versión, El Ojo del Mal representa una aceptable historia con buenos momentos de suspenso y terror, pero es muy inferior a la cinta de los hermanos Pang, quienes escribieron y dirigieron con gran acierto El Ojo en el 2002. Salvo excepciones (como El Aro), la mayor parte de las versiones norteamericanas de las películas de horror orientales han resultado fallidas porque no han trasladado adecuadamente la esencia de las historias originales. El Ojo del Mal sufre del mismo defecto.

El Ojo del Mal: ** (Regular)